¿Por qué a mí?

Dios nos bendice con sus pequeños soldaditos. Aceptémoslos con amor y ternura,

ellos vienen a nosotros para que nosotros les ayudemos a dar amor y respeto.

¿POR QUÉ A MÍ?



He alzado mi mirada y me pregunté “¿por qué a mí?”
Sintiendo una profunda tristeza y desesperación,
porque mi hija nació diferente a los demás, ¿por qué a mi?
Al principio la miré con tristeza y dolor, por su diferente condición.

Pero así la quiero mucho y la saqué adelante con el favor de Dios
y tuve fuerzas para sacarla de su mundo con calma,
con mucha paciencia, cariño, cordura, amor y devoción,
me di a la tarea de hacerla feliz, de darle fuerzas con toda el alma.

Ella es muy inteligente en algunas áreas que el niño promedio,
más consiente y sin morbo, más generosa y sin malicia,
aunque no respondía bien al lenguaje común, tal vez por miedo
mucho menos defenderse de agresiones orales, morales o físicas.

Mi niña, fue agredida por otros de su edad y hasta mayores,
lo peor, en complacencia de las madres de sus agresores,
sólo porque es diferente, amable e inteligente con honores,
no saben que es nuestra alegría, orgullo y menos saben de valores.

La fui integrando, lentamente y luchando por ella, por su bien,
aunque a veces, a veces ni yo misma sabía si estaba haciendo lo correcto,
llegué a pensar si estuviera mejor no integrarla a este mundo tan violento
para que no la lastimaran más, pues la gente es cada vez más cruel.

Pero me di cuenta, que, todavía hay personas amables y tan lindas,
personas que le dan su cariño, su mano y le brindan siempre una sonrisa,
la aceptan porque saben que nunca les hará daño, no tiene malicia
y porque tiene sentimientos más lindos y más puros, está por Dios bendita.

Así como ella, hay muchos más, algunos discapacitados o de diferentes
capacidades,
no importa su condición, sino su amor su alegría y bendición,
la bendición que Dios Padre les ha dado para que nos amemos,
para que los ayudemos, para que nos unamos a ser mejores sin distinción

¿Por qué a mi? Porque Dios me eligió a las demás
para cuidar y amar a sus benditos fieles soldados,
porque Dios nos los trajo para que nos enseñaran a amar,
a respetar y así hacer Su Voluntad como humildes hermanos.

¿Por qué a mi? Eso solo Dios lo sabe y por ello, siempre nos bendice,
somos muy fuertes para llevarlos entre nuestros amorosos brazos,
son de Dios sus fieles soldados, porque nunca lo ofenderán y Su sueño
se realice,
para hacer de este mundo, un mundo mejor, sin cicatrices y con mejores
Resultados.

Ellos son los que tienen una capacidad mejor desarrollada,
esa capacidad, ahora ni siquiera la mayoría la comprenden ni la tienen,
es un Don y regalo que Dios Padre los dotó para que nos llenara
la capacidad de amar intensamente y sí que lo entienden.



¿Por qué a mí? Recuerda que

DIOS PADRE NOS ESCOGIÓ
PARA HACERLOS FELICES
NO TE LAMENTES MÁS
QUE CON ELLOS DIOS
NOS BENDICE.

DIOS NOS LOS ENVIÓ PARA SER Y HACERLOS MUY FELICES.

YA NO TE PREGUNTES MÁS ¿POR QUÉ A MI?
¡GRACIAS DIOS PADRE POR ESCOGERME A MÍ!!
PORQUE POR TI Y POR ELLOS SOY MUY FELIZ
PORQUE ME ENSEÑARON A AMAR, A VALORAR Y…
A REIR
CON SU AMOR Y TERNURA A TODOS NOS HACEN SONREIR.



Pili González